Todas las piezas de Bruma Ceramics se elaboran con mucho mimo para aportar calidez a tus momentos cotidianos. Si deseas prolongar su vida útil y conservarlas en su mejor estado, te recomendamos tratarlas con el mismo cariño con el que han sido creadas.

Fotografia: Laia Rafols

Manipula las piezas con cuidado, ya que pueden romperse si se caen.

Cada pieza está hecha a mano y puede tener ligeras variaciones de dimensión y acabado. La fotografía muestra el color lo más preciso posible, pero pueden producirse ligeras variaciones de color debido al proceso artesanal.  

Todas las piezas son aptas para alimentos, microondas y lavavajillas. Dicho esto, es recomendable lavarlas a mano para garantizar una vida útil más prolongada, ya que los cambios bruscos de temperatura podrían causar estrés temprano en la cerámica. 

No pueden usarse para el horno a no ser que sea una pieza hecha especialmente para hornos. En este caso se informará como es debido. 

Trata de no dejar las piezas con líquido de colores (té, café…) durante mucho tiempo, lo mejor es lavarlas después del uso y guardarlas una vez secas.

Es natural que con el tiempo puedan aparecer marcas de envejecimiento en las piezas, ya que es una propiedad de la cerámica. No obstante, éstas no influyen en su utilidad. La mejor forma de conservarlas es seguir los pasos anteriores.